El vitíligo, una enfermedad multifactorial y de difícil tratamiento.
Esta enfermedad afecta al 1-2% de la población mundial.Foto: EFE/ Sáshenka Gutiérrez |
Ciudad de México: al vivir con vitiligo, es difícil asumir esta enfermedad multifactorial y de lento tratamiento. La piel se convierte en un lienzo con manchas que provocan pudor y vergüenza: "Te ven como un bicho raro", dice Oliver del Valle, que tardó cinco años en asumir que tiene la enfermedad.
El vitíligo es una enfermedad de la piel en la que aparecen manchas blancas en diferentes partes del cuerpo. Se produce cuando el propio sistema inmunitario destruye los melanocitos, las células responsables de producir el pigmento de la piel (melanina).
"Fue muy difícil porque tuve una fase depresiva, no quería salir, me veían con manchas, la gente no para de preguntar qué tienes y la misma familia te dice que te maquilles", dijo en una entrevista con Efe.
El vitíligo es una enfermedad de la piel en la que aparecen manchas blancas en diferentes partes del cuerpo. Se produce cuando el propio sistema inmunitario destruye los melanocitos, las células responsables de producir el pigmento de la piel (melanina).
Según Miriam Puebla Miranda, jefa del servicio de dermatología del Hospital Juárez (HJM) de México, entre el 1% y el 2% de la población mundial está afectada por esta enfermedad.
En México, ocupa el tercer y quinto lugar entre todas las enfermedades de la piel, y representa el 1% de todas las personas que padecen la enfermedad.
Según los expertos, el vitíligo es una enfermedad adquirida, crónica, multifactorial y no contagiosa que afecta principalmente a la piel de la cara, el dorso de las manos, las axilas, la ingle, el ombligo, los genitales, las rodillas y los codos.
"Los síntomas son simplemente cambios de coloración que no causan ninguna molestia más que la estética", explica. Fue la estética la que alertó a Oliver de la condición.
“Un día fui a hacerme un cambio de imagen, y me depilaron las cejas y sentí como si la zona de la piel estuviera quemada por el sol y desde entonces he notado que me faltan partes del pelo, como si se hubieran caído mechones y la zona está blanca", cuenta.
A raíz de esta situación, Del Valle pidió ayuda a un familiar que es médico y le aconsejó que acudiera a un especialista.
"En la primera consulta, lo primero que me dijeron fue que era por estrés porque era una persona nerviosa", dice.
Sin embargo, cuando llegó con Miriam Puebla, se dio cuenta de cuál era su diagnóstico.
"Lo primero que me dijo fue que era un tratamiento lento que podía durar meses o años y que las manchas podían desaparecer o bajar un poco", señala.
Según el médico, la enfermedad puede ser hereditaria, ya que hasta el 20% de los casos tienen antecedentes familiares.
En el caso de Oliver, su madre tenía la enfermedad, pero "la tenía en el cuerpo, no en la cara, y llevaba mangas largas, pantalones y sombrero y nunca la mostraba", dijo.
Para combatir el vitíligo, los dermatólogos suelen prescribir una combinación de tratamientos para optimizar los resultados.
El objetivo de estos fármacos es repigmentar la piel, es decir, volver a colorearla, y en la mayoría de los casos tienen éxito.
El vitíligo es una enfermedad que no se puede prevenir, pero Miriam Puebla recomienda estar atentos y detectar las manchas a tiempo para evitar que la enfermedad avance.
Sugerencia de Red Vitíligo:
Red-Vitíligo recomienda hacer la visita a un Dermatólogo o Especialista con conocimiento o familiarizado en este padecimiento antes de optar y emplear cualquiera de los tratamientos o consejos de los que se habla aquí, ya que muchos de ellos necesitan de una supervisión médica.